lunes, enero 24

Mi parque de atracciones. 0:29 AM



   Y a mis objetivos prefiero llamarlos horizontes en lugar de  "nortes", porque por más que lo intento nunca los alcanzo. Como en un día de niebla, estos parecen difuminarse en la lejanía. Sus alas parecen fundirse en una densa cortina de humo dejando una estela que para mí, sigue siendo tan sólida como el suelo que piso. El azul cielo se torna gris de la noche a la mañana, los despertares agrios y el gusto, al de la noche anterior.
   El día me sirve como placebo, el sonido del móvil como la mejor panacea nunca existida y su sonrisa un elixir mágico cada día más difícil de conseguir, aunque aún no me he dado por vencido.
   A estas alturas me toca hacer un balance de año anterior, y recapitulando, he llegado a la conclusión de que no ha existido un enero, un abril o un diciembre; solo un antes y un después, un septiembre, verde o negro, ella y yo, o solo yo.

"No te pediré nada nuevo, sólo quiero lo de ayer."